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Las 7 claves de la Reglamentación del RIGI que entra en vigencia hoy
Viernes, 23 de agosto de 2024
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El Gobierno publicó esta madrugada en el Boletín Oficial la reglamentación del esquema con el que pretende atraer grandes inversiones extranjeras en sectores clave de la economía
El Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) fue reglamentado por el Gobierno Nacional este viernes. A través de esta normativa, se establecen beneficios fiscales, aduaneros y cambiarios para fomentar grandes proyectos de inversión en sectores estratégicos. A continuación, se detallan los principales aspectos del régimen que ya está en marcha y cómo busca atraer inversiones al país.
1. Qué es el RIGI y a quién está dirigido? El Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI) es un esquema que tiene como objetivo principal atraer inversiones de gran envergadura a sectores estratégicos de la economía argentina. Se trata de proyectos de inversión cuya magnitud excede los 200 millones de dólares, lo que significa que el capital involucrado es considerablemente alto. La idea es generar incentivos que mejoren el clima de negocios y atraigan tanto a inversores nacionales como extranjeros, aunque los proyectos más grandes probablemente provendrán del exterior, dado el tamaño de las inversiones requeridas.
El RIGI está diseñado para ofrecer seguridad jurídica y fiscal a los inversores, bajo la idea de que la previsibilidad es fundamental para asegurar la confianza de quienes desean desarrollar proyectos a largo plazo en el país. Este régimen se enmarca dentro de las políticas del Gobierno de Javier Milei para incentivar la producción, aumentar el empleo y mejorar las exportaciones mediante la llegada de inversiones que puedan transformar sectores clave de la economía.
2. Sectores alcanzados por el régimen: ¿quiénes pueden participar? El RIGI no está abierto a cualquier tipo de inversión. Solo ciertos sectores estratégicos de la economía argentina pueden acceder a los beneficios del régimen, lo que refleja una política orientada a fortalecer áreas que tienen un impacto significativo en el desarrollo productivo y económico del país. Los sectores que podrán acogerse a este régimen son: forestoindustria, turismo, infraestructura, minería, tecnología, siderurgia, energía y el rubro de petróleo y gas.
Forestoindustria
Incentivos para la industrialización y explotación de recursos forestales. Facilidades fiscales y aduaneras para la importación de bienes de capital y repuestos. Turismo
Apoyo a proyectos relacionados con hospedaje y alojamiento. Exenciones impositivas y aduaneras para infraestructura turística. Infraestructura
Beneficios para la construcción de redes y sistemas públicos y privados, incluyendo transporte, logística y proyectos de esparcimiento. Exenciones de derechos de importación para bienes de capital vinculados a obras de infraestructura. Minería
Fomento de la prospección, exploración, desarrollo y explotación de minerales. Exenciones de derechos de importación para maquinaria y repuestos utilizados en actividades mineras. Tecnología
Incentivos para el desarrollo de bienes y servicios tecnológicos innovadores en áreas como biotecnología, nanotecnología, inteligencia artificial y más. Mejores condiciones tributarias para empresas tecnológicas que inviertan en innovación. Siderurgia
Promoción de la industrialización y procesamiento de hierro, acero y aleaciones. Beneficios fiscales para la producción de productos primarios y elaborados en la industria siderúrgica. Energía
Incentivos para la generación, almacenamiento, transporte y distribución de energía, incluyendo fuentes renovables. Exenciones impositivas para proyectos energéticos de gran envergadura, tanto en energías renovables como no renovables. Petróleo y Gas
Exenciones de derechos de importación para infraestructura relacionada con la explotación de hidrocarburos, petroquímica y gas natural licuado. Flexibilidad cambiaria para los proyectos de largo plazo y exenciones de derechos de exportación durante los primeros tres años.
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