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Sarmiento festejó en Bahía Blanca y es de Primera
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Sábado, 21 de mayo de 2016
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 En el 'Roberto Carminati', el 'Verde' se impuso 1 a 0 ante Olimpo por el tanto de Renzo Spinaci a un minuto del final. Los de Junín se iban al desempate con Argentinos, que ganó de visitante en Rafaela. Sin embargo, el tanto agónico lo dejó en Primera División, mandó a la B Nacional al 'Bicho' y le dio otra hazaña más al 'Tano'.
El título para un club es algo único, pero salvarse del descenso es un sentimiento que muy pocos pueden describir porque se sufre de manera increíble y no depende de uno mismo, sino que muchas veces hay que sacar cuentas con el promedio y ver qué hace el resto. Así se puede resumir la historia de Ricardo Caruso Lombardi, que estuvo cerca de irse a la B Nacional, de jugar un desempate por la permanencia y finalmente, cuando el encuentro se iba, un gol agónico le dio la salvación a Sarmiento, que venció 1 a 0 a Olimpo en Bahía Blanca por el tanto de Renzo Spinaci, quien entró para aguantar el empate y le dio el tanto de la salvación.
Sarmiento no la pasó bien en la cancha de Olimpo, porque sufrió bastante en un partido que tuvo una etapa inicial pareja y un segundo tiempo que estuvo más cerca de ganarlo el local (al que le anularon bien un gol). Chances increíbles perdieron Joel Amoroso y Elías Borrego, quienes tuvieron las oportunidades para condenar al descenso al equipo de Caruso Lombardi, quien solamente una vez perdió la categoría y fue justamente frente al 'Aurinegro', que en 2011 lo mandó a la B Nacional ganándole 1 a 0 en cancha de Quilmes, equipo que dirigía el técnico.
Pero la suerte apareció para el 'Verde', equipo que agarró a mitad de campeonato el entrenador y al que fue levantando de a poco, aunque con un bajón en la parte final del certamen. Sabiendo que Argentinos había ganado en cancha de Rafaela, los de Junín no podían perder y con el empate ya sabían que tenían que jugar el desempate. Sin embargo, una gran jugada de Diego Chaves escapando por el lateral izquierdo le permitió ir hacia el medio y pasarle la pelota a Spinaci, quien apareció en la medialuna y con precisión colocó el balón al lado del palo derecho de Nereo Champagne para desatar la locura de todo el equipo que logró conservar la categoría de la mano del entrenador especialista en evitar el descenso.
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