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Boca Unidos fue efectivo, sumó otro triunfo y todavía sueña
El equipo correntino le ganó 2 a 0 a Ferro Carril Oeste con goles convertidos en el primer tiempo por Franco Cángele, de penal, y Juan Bravo, quien fue expulsado en la segunda mitad. Con este resultado, el aurirrojo recuperó la posición de escolta, aunque a nueve unidades del puntero, Talleres de Córdoba.
RUBEN POLETTI rpoletti@ellitoral.com.ar
Practicidad y contundencia en su justa medida, fueron los valores que le permitieron ayer a Boca Unidos superar, de local, sin mayores inconvenientes a Ferro por 2 a 0, y seguir ilusionado con el ascenso a Primera. El partido, correspondiente a la decimoquinta fecha del torneo de transición 2016 de la Primera B Nacional, le permitió al conjunto correntino recuperar la posición de escolta del sólido puntero, Talleres, aunque a una distancia de nueve unidades del equipo cordobés. El aurirrojo definió el encuentro en los primeros cuarenta y cinco minutos, lapso en el que aprovechó dos de las cuatro situaciones favorables para marcar que tuvo, haciendo la diferencia con un penal que Franco Cángele transformó en gol y un terrible zapatazo de Juan Bravo. Comenzó mejor el local, que a los pocos minutos estuvo a punto de adelantarse en el resultado, tras una jugada con pelota detenida. Tiro de esquina de Fabro que Olivera le ganó a todos ingresando por el centro del área, aunque su cabezazo terminó yéndose muy cerca del palo derecho de López. En ese lapso, los dirigidos por Paolo Montero buscaron hacer circular la pelota al ras del piso y a un toque para sacarse de encima la presión del conjunto de Caballito, y al mismo tiempo ir encontrando espacios. Sus abanderados fueron Fabro, que quitó y jugó en su función de “doble cinco” al lado de Escobar, y Vergara, que ganó cada vez que se propuso encarar a Menguez. Tras un quite de Escobar, y una doble pared entre Baroni y Vergara, se inició la jugada que derivó en el primer gol del partido. El neuquino desbordó por la izquierda y cuando echó el centro, se interpuso la mano de Larrea que cerraba, no dudando Penel en cobrar penal, que el goleador Cángele cambió por gol. Después de la apertura del marcador, Boca Unidos siguió teniendo la posesión de la pelota y triangulando con acierto, aunque a sus ataques le faltó mayor profundidad para dejar a un jugador mano a mano con el arquero adversario. Ferro, que sólo buscaba protegerse cerca de López, inquietó por primera y única vez en la etapa, con una combinación entre Vernetti y Ojeda, cuyo centro cruzó toda el área chica, alejando el peligro Bravo, con una barrida cerca de la línea de gol. Un tiro libre de Fabro desde aproximadamente 30 metros, cuyo remate salió a centímetros del vertical derecho, fue el preaviso del segundo gol del local. Tras un nuevo desborde de Vergara por izquierda, que a Núñez se le fue largo el control, llegó un rechazo defectuoso desde el fondo, y Bravo que estaba a la expectativa pescó el rebote, y con la pelota picando al borde del área grande, sacó un fortísimo derechazo que luego de dar en el travesaño ingresó al arco para poner el 2 a 0 con el que se cerró la etapa. En el complemento, el técnico visitante, Walter Perazzo, movió la estantería, adelantando a su equipo 20 metros en el campo de juego. Hizo ingresar a Pérez y Afranchino por Alvarez y Larrea, respectivamente, buscando que Vizcarra tenga más compañía arriba, y al mismo tiempo mejorar el volumen de juego del conjunto de Caballito. Sin embargo, el que primero llegó fue el local. Fabro envió un preciso centro al punto del penal, y cuando Cángele se preparaba para cabecear, recibió el empujón de Menguez, en una clara falta penal que esta vez, el árbitro dejó pasar. Al minuto, Oeste pudo haber puesto el descuento. Desborde de Manzur, que metió el centro atrás, Vernetti aguantó y descargó hacia atrás para Pérez, cuyo remate, que tenía destino de arco, dio en la pierna de Escobar y se fue al córner. En Boca Unidos ingresó Diego Sánchez Paredes en lugar de Cángele, quien salió con un traumatismo, reforzando de esta manera Montero la media cancha; mientras que luego de algunos minutos, en la visita, Izco reemplazó a Vizcarra, que se retiró con una molestia muscular. Lo tuvo otra vez el aurirrojo para aumentar, cuando Baroni habilitó tras un lateral a Núñez, que combinó de cabeza con Fabro, quien ingresó al área, y antes del achique de López, definió de zurda, saliendo la pelota apenas ancha. Enseguida llegó la expulsión de Bravo por doble amonestación, tras una falta a Izco (la primera amonestación fue injusta), rearmándose el local con el ingreso de Alan Pérez por Hoyos, plantando a Escobar y Sánchez Paredes en la mitad de la cancha, y pasando Fabro al sector derecho. El técnico uruguayo quemó la última modificación con el ingreso de Herrera por un extenuado Vergara, en un cambio que no alteró la estructura del equipo. A pesar de contar con un hombre menos, el local no tuvo apremios, al punto que Ojeda no tuvo que intervenir en ninguna situación apremiante, mérito de la defensa en general, sobre todo de los dos zagueros centrales, que nuevamente jugaron en buen nivel. La última también fue para el local, cuando Núñez jugó en velocidad para Escobar, quien tuvo que abrirse hacia la izquierda por el achique del arquero López, quedando sin ángulo, por lo que su remate de zurda dio en la parte exterior de la red. Fue nueva victoria de Boca Unidos, casi sin despeinarse, ante un Ferro juvenil, en una clara muestra de practicidad y efectividad. Los tres puntos conseguidos le permiten al aurirrojo aferrarse todavía a la ilusión de poder pelearle el ascenso a Talleres, a pesar de que cada vez falta menos para el final; pero mientras los números den, el sueño continuará.
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