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"Esperemos que esta vez se complete, por favor"
Martes, 19 de abril de 2016
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"Al 99% de los que les gusta el fútbol no quieren que termine de esa manera. Son cosas que pasan", recordó el juez del próximo Boca-River sobre el duelo suspendido por la agresión con gas pimienta
Darío Herrera no se olvidará nunca más haber sido el protagonista del Superclásico que debió ser suspendido por la agresión a los jugadores de River con gas pimienta. Era su primera vez impartiendo justicia en el partido más importante del país que apenas duró 45 minutos y significó la eliminación de Boca de la Copa Libertadores.
Con el fresco recuerdo en su cabeza, el hombre que reside en Lincoln estará por tercera vez en un enfrentamiento de esta características justamente en el momento en que volverá a llevarse a cabo en la Bombonera. "Estar en este clásico es algo muy lindo. Esperemos que esta vez se complete, por favor. Que salga todo muy bien", destacó entre algunas risas en diálogo con Closs Continental. Y agregó: "Lo que pasó extra ese día es lo que sentimos todos. Al 99% que le gusta el fútbol quiere que no se termine de esa manera. Son cosas que pasan, que a uno le duelen, pero son la realidad".
Aunque también se mostró feliz por los 45 minutos que impartió justicia aquella fatídica noche. "Analizo los 45 minutos que tuve que dirigir junto a mis compañeros y la verdad que fue muy positivo, con cosas mínimas para mejorar".
Más allá de la alegría por la denominación, Herrera reconoció su gravitante error el último fin de semana en Lanús-Rafaela que puso en jaque su presencia en el Súper. "Dudé que me citen. Cuando cometemos errores no los hacen saber, es algo apropiado. Cuando uno se equivoca como yo el fin de semana, le sacan un poco las chances", aceptó.
Y explicó qué cobró en el agónico penal que significó el triunfo del Grana: "Es una jugada difícil y rápida. En todo momento estoy observando ahí, veo que le pega en la mano la pelota y por eso sanciono penal. Estaba 100% seguro. Son tan rápidas las jugadas que uno espera llegar al vestuario y ver si había sido blanco o negro". Además de reconocer que "cuando el jugador que cometió la infracción protesta con tanta seguridad te entra un margen de duda".
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