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Independiente venció a Vélez y es escolta
Lunes, 18 de abril de 2016
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Los de Avellaneda quedaron a sólo dos unidades de los líderes Godoy Cruz y San Lorenzo. En el 'José Amalfitani', el 'Rojo' no dejó pasar su chance y le ganó 2-0 al 'Fortín'. Jorge Ortiz abrió el juego luego de un grosero error de Fabián Asmann (se le escapó la pelota), quien luego salió lesionado; mientras Emiliano Rigoni estiró la ventaja. Tras un nuevo traspié del puntero (Godoy Cruz no pudo con Gimnasia y apenas empató), la Zona 1 se ponía más caliente que nunca. Y dos protagonistas a los que se les renovaban las esperanzas les tocaba enfrentarse en una lucha despiadada por no dejar escapar lo que podía ser quizás el último tren. Se trataba de Independiente y Vélez, quienes se medían en la casa de éste último.
Y un José Amalfitani sorprendentemente en buen estado pese a las incesantes lluvias de los últimos días, las emociones no demoraron en hacerse presentes. Fue el Rojo quien se mostró mucho más encendido desde el inicio, dando espectáculo incluso a puros tacos. Tal era el asedio del elenco visitante que el primer golpe no demoró en llegar. No se habían cumplido siquiera los diez minutos cuando un ex le dio el regalo más grande que pudo: Fabián Assmann saltó solo a capturar la redonda, pero increíblemente se le escapó de las manos y, mientras la buscaba desorientado por el verde césped, apareció Jorge Ortiz para empujarla hacia el fondo de la red. Tras este insólito blooper, el rubio arquero pidió el cambio porque se le dislocó el hombro.
Tras la apertura del marcador, el Fortín intentó reaccionar pero se lo vio falto de recursos como para hacerlo. Es que carecía de profundidad y sólo insinuaba hacer la diferencia cuando la pelota pasaba por los pies de un Hernán Toledo que muy inofensivo resultaba ser al gambetear cerca del mediocampo y muy lejos del área rival. Por su parte, los de Avellaneda enloquecían a la defensa rival gracias a los inquietos y desequilibrantes Claudio Aquino y Leandro Fernández. Éste último hizo temblar el travesaño, probó a distancia y también desde adentro del área. Lo cierto es que sólo la falta de precisión de la visita permitió que la primera mitad finalizara con una ventaja mínima.
La reanudación del juego fue casi un calco del inicio del partido. Es que Independiente no dejó pasar el tiempo y dio un certero golpe de entrada que prácticamente cerró el partido. Fue apenas a los tres minutos Emiliano Rigoni sorprendió a todos picando al vacío y metiendo el pie para decretar el 2-0.
Nuevamente se repitió el desarrollo de la etapa anterior. Es que Vélez no encontraba los caminos para doblegar a su firme adversario, ni siquiera hallaba respuestas ni frescura en el banco, mientras que el Rojo disputaba uno de sus mejores partidos colectivos: circulación, creación de ataques y firmeza en el fondo para anular al rival.
Así las cosas, la pérdida de chances en ataque no alarmaba a una visita que no sufría sobresaltos y jamás vio peligrar el triunfo que estaba logrando con total justicia. El 2-0 final terminó metiéndolo de lleno en la pelea, al quedar como escolta a tan sólo dos unidades de los líderes Godoy Cruz y San Lorenzo, llegando por demás envalentonado al clásico de la próxima fecha. Por su parte, Vélez terminó de despedirse.
- Estadio: José Amalfitani - Árbitro: Mariano González - Zona: 1
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