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Condenado por homicidio recibió brutal golpiza
Miércoles, 20 de septiembre de 2017
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 Se trata de “Josele” Altamirano. En el ataque los reos utilizaron armas blancas y garrotes. “Josele” Altamirano, condenado por la muerte del joven estudiante sanroqueño Maxi Aquino, tiene un corte profundo en la cabeza y varias heridas en su cuerpo tras ser atacado por sus compañeros del pabellón donde está detenido. Familiares se manifestaron frente al Poder Judicial y solicitaron su traslado para protegerlo de otras posibles agresiones. Altamirano lleva dos años detenido en la Unidad Penal Nº6 de San Cayetano por el crimen de Maxi Aquino, hecho ocurrido en el 2015. En la noche del lunes a “Josele” lo molieron a golpes e intentaron apuñalar. “Fueron presos que estarían vinculados al asesinato del estudiante Aquino”, comentó a época Analía Altamirano, madre del condenado. Los familiares de Altamirano fueron informados por un “interno” del Penal sobre el hecho. “Esto motivó que a primera hora se presentara en la Unidad, Analia la madre de Josele y fue quien le observó una herida profunda en la cabeza y lo vio caminar con dificultad” señaló el abogado Hermindo González a este medio. “La familia considera que la agresión se debe a que días atrás ubicaron en el mismo pabellón a un muchacho que estaría vinculado a la muerte de Aquino (Maxi) y a un tío de otro (sospechoso) que se lo considera participe del crimen. Esta situación sería la que originó el enfrentamiento” agregó el letrado. “Por la pelea desatada en el penal, quedó malherido otro interno de apellido Blanco, quien sería trasladado a una dependencia de la ciudad de Goya”, dijo por su parte una voz oficial a época. El altercado habría ocurrido cerca de las 21 y los elementos utilizados, por las heridas de los involucrados, serían armas blancas, palos y otros objetos contundentes.
Ayer cerca del medio día, González hizo una presentación en el Tribunal Oral Penal Nº2 (TOP 2) en el cual puso en conocimiento lo ocurrido y solicitó que se le brinde una protección a la “vida e integridad” de José Altamirano. La madre mostró ante la prensa la camiseta ensangrentada de “Josele” y dijo “esta es la verdadera sangre de mi hijo, no la implantada en el pantalón para condenarlo” haciendo alusión a la única prueba que lo llevó a prisión por la muerte del joven sanroqueño.
Con sentencia
El pasado 3 de octubre, el Tribunal Oral Penal Nº2 de esta ciudad sentenció a 22 años de prisión a Juan José Andrés Altamirano, “Josele”, por homicidio simple y lo absolvió del delito por robo calificado por el uso de arma en grado de tentativa, por el crimen de Maximiliano Aquino ocurrido el 1 de agosto de 2015. “Maxi”, de 21 años, en la madrugada del 1 de agosto salió de una peña universitaria en el Club de Regatas. Decidió acompañar a una amiga hasta su casa. Ambos transitaron por calle Rolón y luego retomaron por Uruguay al 300, a pocos metros de llegar a calle Baibiene fueron interceptados por dos delincuentes a bordo de una moto 110. Ante un intento de robo, “Maxi” evitó que su amiga resulte lastimada. Proteger a su amiga le costó la vida. Recibió 14 puñaladas.
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