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Procesaron al ex yerno de Jaime como su testaferro
Jueves, 8 de junio de 2017
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El juez Casanello determinó que Sebastián Ledantes contribuyó al enriquecimiento ilícito del ex funcionario kirchnerista Ricardo Jaime está preso por corrupto. Condenado por la Tragedia de Once, el ex secretario de Transporte de Néstor y Cristina Kirchner deberá afrontar un juicio oral y público por el delito de enriquecimiento ilícito.
Es el primer kirchnerista que confesó haber cobrado coimas y por eso fue condenado. En la causa por enriquecimiento ilícito quedó demostrado que utilizó como testaferros a Julieta Jaime, una de sus tres hijas, a su ex mujer Silvia Reyss, a las dos hijas de ella, e incluso a su suegra. Pero también a quien fuera por apenas unos meses el esposo de su hija Julieta, Sebastián Ledantes.
Ledantes estuvo casado con la hija de Jaime y gracias a eso se convirtió en apoderado de la sociedad Lago Azul que compró un hotel que administraba Julieta Jaime. Es decir que Lago Azul, formada por dos ejecutivos de la Terminal de Ómnibus de Retiro, le compró un hotel a Jaime. Por ese delito deben ir a juicio oral y público como testaferros de Jaime Alfredo Pielach y Lisandro López. Ambos son empleados de Néstor Otero, dueño de la Terminal de Retiro quien coimeó –algo dilucidado en otro juicio- a Jaime.
Ledantes, los meses que estuvo casado con Julieta Jaime, trabajó para la sociedad que compró el hotel Saint Tropez de Carlos Paz. Y de ese modo intervino como testaferro de Jaime.
Ricardo Jaime está preso por enriquecimiento ilícito (Foto: NA) Ricardo Jaime está preso por enriquecimiento ilícito (Foto: NA) Luego de que el caso de Ledantes llegara a la Cámara de Casación por apelación del fiscal Germán Moldes y ese tribunal ordenara que se lo investigue, el juez Sebastián Casanello le dictó el procesamiento. Lo hizo después de que el fiscal que sigue el caso, Carlos Rívolo, determinara que Ledantes, durante los meses que estuvo a cargo de la firma que manejaba el hotel de los Jaime, compró dólares, efectuó gastos a través de la tarjeta de crédito y registró ingresos en su cuenta bancaria. Cuando Rívolo pidió el procesamiento del ex yerno de Jaime señaló que esos ingresos y egresos en la economía de Ledantes cuando fue administrador del hotel denotan que la explotación comercial funcionó. Y eso le había permitido obtener ingresos no sólo a su verdadero dueño -es decir el ex funcionario kirchnerista-, sino también a Ledantes, que fue el administrador. Para los investigadores quedó claro que Ledantes contribuyó para disimular el enriquecimiento de Jaime.
Casanello, en su procesamiento al que Infobae accedió en fuentes judiciales señaló que "Las pruebas recabadas en esta instancia indican que la intervención de Sebastián Andrés Ledantes conformó un aporte esencial en la adquisición, administración y uso de aquellos bienes. Es decir, todas las constancias recabadas en la presente permiten concluir que el verdadero dueño, oculto detrás de quien prestó el nombre para la operación de compra de los bienes, no era otro que Ricardo Jaime, quien tenía la capacidad económica real e ilícita pero no tenía la posibilidad de figurar como verdadero dueño debido al carácter espurio de su enriquecimiento. Entonces, Sebastián Andrés Ledantes contribuyó necesariamente a los fines de ocultar o disimular el patrimonio ilícito de Ricardo Jaime".
Ledantes deberá ir a juicio oral y público si la Cámara Federal confirma el procesamiento. En el banquillo de los acusados estarán –entre otros- su ex suegro, su ex esposa, su padre Norberto Ledantes y su madre Graciela Vigna a quien Jaime también puso como testaferros. Ellos, sus ex consuegros, a su vez, denunciaron a Jaime por usar plata negra y cobrar coimas. Todo queda en familia.
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