La Provincia analiza soluciones para los más afectados

Lunes, 18 de enero de 2016

Los damnificados que se encuentran en la Escuela 299 siguen en alerta ante la posibilidad de tener que abandonar el lugar. Denuncian falta de asistencia.

El Ministerio de Educación resolverá si deben dejar del establecimiento. Dicen que sólo 5 familias no pueden regresar a sus casas y evalúan alternativas.

Hace más de un mes y medio, la Escuela 299 refugia a los damnificados de los barrios Galván, Caridi y Ponce. Pero la convivencia se ha vuelto difícil entre los encargados de la institución y los evacuados, a raíz del pedido de restitución del establecimiento escolar. Desde el ministerio de Desarrollo Social sostienen que el acto de solidaridad tiende a convertirse en otra cosa, dado que los mismos se generan expectativas erróneas. Asimismo aseguran que se están estudiando soluciones posibles para las familias que realmente no están en condiciones de regresar a su vivienda.
El clima tenso se inició días atrás, cuando los refugiados tomaron conocimiento de que tendrían que desalojar el lugar, dado el inicio de clases, lo que generó malestar y la contundente negativa argumentando que no tienen a donde ir, ya que han perdido todo y la zona está llena de todo tipo de alimañas y humedad.
En dialogo con El Litoral, Karina evacuada del barrio Caridi manifestó que nos comunicaron que tendríamos que dejar la escuela y en relación a los inconvenientes suscitados con la directora de la escuela indicó: “Nos quitó las mesas y las sillas donde cenaban nuestros hijos y las guardó bajo llave, como así también la olla y otros elementos que usábamos para prepararle la leche a los chicos, porque según ella estamos fundiendo las cosas”.
“En la escuela hay 19 familias evacuadas, somos aproximadamente 80 personas, de las cuales 35 son pequeños, desde meses de edad hasta los 12 años, incluso tenemos a un niño discapacitado que necesita atención médica”, sostuvo.
Alicia, evacuada del barrio Ponce, expresó que “a nosotros nadie oficialmente nos dijo que mañana (por hoy) tendríamos que desalojar, pero los vecinos nos dicen que eso es lo que se dice, pero tengo miedo que cualquier día vengan y me saquen a la calle con mis cinco hijos, tengo un nene que tiene microcefalia motora y ahora esta con broncoespasmo y granos en la cabeza y nadie viene a verlo”.
“No tenemos a donde ir, perdimos todo, mi casa está bajo agua todavía y no puedo volver en esas condiciones ya que tengo dos nenes y mi esposa perdió la vista de un ojo”, aseveró Antonio otro de los damnificados.
Por su parte el secretario de Desarrollo Humano e Igualdad Diógenes González, indicó que “el que habilita la entrada, permanencia y salida de la escuela es el Ministerio de Educación y no tengo conocimiento de las medidas a adoptar en los próximos días”.
El funcionario provincial también señalo que “esta historia ya la vivimos en el 2013” y aseguró que “actualmente sólo 4 o 5 familias son las que no pueden regresar a sus hogares, dado que se encuentran todavía bajo agua, pero el resto ya podría hacerlo, como está sucediendo en otras zonas afectadas·.