Declaró el testigo clave del caso y aportó nuevos datos

Martes, 29 de diciembre de 2015

El hombre que presenció el homicidio junto a su hijo de 16 años compareció ayer a la mañana en el Juzgado de Instrucción de Mercedes. El menor también estaba citado a declarar.

El declarante fue indagado por los fiscales Enrique Deniri y Buenaventura Duarte. Se esperan los resultados de pericias a celulares y al vehículo confiscado en Buenos Aires.

A pesar de la feria Judicial, continúa la investigación por el asesinato del empresario yerbatero, Héctor Sartori (74). Ayer declaró en el Juzgado de Instrucción de Mercedes, el testigo clave de la causa. Se trata de un hombre de apellido Cabral quien en principio se creyó que era el capataz de la víctima, pero luego se estableció que solamente hacía trabajos. Esta persona estuvo en el momento en que un grupo de delincuentes los sorprendió en la zona de potreros de la Estancia “Santa Teresa”. Cabral estaba con su hijo de 16 años. Los maniataron a ambos. En tanto que a Sortori que se resistió lo golpearon y lo ataron a una tranquera. Allí le dieron una feroz golpiza que le ocasionó la muerte.
El pasado 10 de diciembre, Cabral declaró en sede policial. Ayer compareció y fue indagado por los fiscales Enrique Deniri y Buenaventura Duarte.
“Hemos interrogado profundamente al señor Cabral. Lo que puedo decir es que ha ratificado casi toda la declaración que hizo en sede policial y ha agregado algunos elementos que pueden interesar a la causa”.
Sobre Cesar Ferraú (35), único detenido por el homicidio, dijo que permanecerá preso a disposición de la Jueza López Rivadeneira y ahora que están en feria a disposición del Juez de turno. “El detenido ya ha prestado declaración” confirmó el doctor Duarte, por lo que con el avance de la causa, deberán resolver su situación legal.
Estaba previsto que ayer a la tarde también declarará el menor de 16 años, hijo de Cabral.
El hecho se registró el domingo 6 de diciembre, alrededor de las 16, dentro de la Estancia “Santa Teresa” propiedad de Sartori, ubicada por Ruta Nacional Nº 123, entre los kilómetros 77 y 88.
Todo comenzó cuando al menos cuatro delincuentes llegaron a la zona del potrero donde se encontraba Sartori con Cabral y un menor. Mediante amenazas y la exhibición de armas de fuego los redujeron a todos. Con la utilización de alambres, los ataron de pies y manos. Allí comenzó la tortura. Se desconoce con qué intención los agresores empezaron a golpear a Sartori en el rostro hasta desfigurarlo por completo. El empresario falleció tras la salvaje paliza.
Antes de escapar, los delincuentes mataron a un hombre que habría llegado a la estancia con ellos. El sujeto fue encontrado junto al cuerpo de Sartori. Tenía un impacto de bala, con orificio de entrada en la nuca y orificio de salida en la parte superior del rostro, además de un profundo corte en el cuero cabelludo, sobre la oreja derecha.
Se investiga si fue un informante que pudo ser usado para llegar hasta el lugar y luego ejecutado por la banda con un arma de fuego.