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Olarticoechea le pide plata a su hija para vivir
Jueves, 11 de agosto de 2016
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“Mi mujer me dice que hable con los dirigentes, que necesitamos plata. Le estoy sacando a mi hija. Es para llorar, pero es la realidad”, se quejó
La crisis en la AFA no tiene límites y está mostrando su costado más despiadado con el entrenador de la selección olímpica como ejemplo. Julio Olarticoechea contó que hace meses que no percibe su salario y debe pedirle plata a su hija para poder vivir.
"Ayer me llamó mi señora y me dijo que está sacando plata de mi hija, que es repostera de primera y gana muy bien. Me dice que hable con los dirigentes, que necesitamos plata. Le estoy sacando a mi hija. Es para llorar, pero es la realidad", reconoció el Vasco en diálogo con el programa O'Donell Continental.
"Yo gano muy poco y no lloro. Escucho gente que nos critica, que dicen que acá se piensa en la plata. Están todos equivocados. Cuando uno llega a este nivel la plata no te interesa, sí la camiseta", explicó el técnico que hasta acá no había hecho visible su reclamo salarial.
No es el único que no percibe el sueldo en la estructura de la Selección. Según el técnico, también vive la misma problemática su auxiliar. "Caldera, mi ayudante de campo, hace mil cosas, gana 18 mil pesos por mes y hace tres que no le pagan", reclamó.
“Cuando uno llega a este nivel la plata no interesa, sí la camiseta”, confesó (Reuters) “Cuando uno llega a este nivel la plata no interesa, sí la camiseta”, confesó (Reuters) Sin embargo, admitió que su asistente también priorizó el equipo olímpico que perdió en primera ronda tras jugar ante Portugal, Argelia y Honduras. "Le puso onda, organizó todo para los pibes. Nos ayudó un montón", señaló.
El Vasco, que tiene contrato hasta marzo con la AFA, prefirió centrarse nuevamente en los problemas que existen con las diversas selecciones antes que en su deuda. "Estas cosas desprolijas tienen que servir para que los dirigentes entiendan que hay que hacer un trabajo serio y a largo tiempo, que por ahora no hay", sentenció.
Cabe destacar que el entrenador tomó el cargo en el seleccionado olímpico tras la inesperada renuncia de Gerardo Martino. Si bien el Tata no dimitió por los problemas estrictamente económicos, llegó a acumular una deuda salarial de siete meses mientras estaba al mando del equipo nacional.
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