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Retó a una alumna y recibió una brutal golpiza
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Jueves, 30 de junio de 2016
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 Familiares de la adolescente sorprendieron a la profesora en la escuela N°18 de Zárate, la arrojaron al piso, le arrancaron mechones de pelo y la golpearon con piñas y patadas.
Un nuevo caso de violencia escolar tuvo lugar en la escuela secundaria N°18 de Zárate, donde Mariana González dictaba clases de Construcción de Ciudadanía. Una de las alumnas ignoraba las consignas porque estaba escuchando música con su celular. La docente le pidió que apagara el dispositivo, pero recibió una respuesta inesperada: "Vos no sos nadie para decirme qué hacer". Seguidamente, la estudiante se fue del aula.
El mal trago pasó y la docente continuó con la clase pese a que la relación con la alumna empeoraba. El jueves pasado pasó lo impensado. González terminó su clase, salió del aula y fue brutalmente atacada a golpes por la mamá y dos hermanas de la alumna. La arrojaron al piso, le dieron piñas, patadas y hasta le arrancaron mechones de pelo. Personal de la escuela intercedió, pero no logró frenar la golpiza.
"Estoy muy angustiada. No sólo por la golpiza sino porque esa es mi escuela. Y no sé si podré volver a dar clases ahí", aseguró la docente en declaraciones reproducidas por Clarín. La mujer está de licencia y con kinesiología recuperándose de las lesiones. Sufrió traumatismos cervicales y hematomas en distintas partes del cuerpo. Por el incidente, la alumna de tercer año del secundario fue expulsada del colegio al igual que su hermana.
El caso derivó en una protesta gremial de más de 600 personas en pedido de justicia y protección para los profesores frente a la Dirección de Inspección del distrito. "Cuando le pedí que dejara de escuchar música, comenzó a insultarme y se fue", relató la mujer.
Después, apareció la madre de la estudiante y le dijo: "Si vos le rompiste el celular a mi hija yo te voy a romper el auto". Según la denuncia que está en la fiscalía N°7 de Zárate, el vehículo fue abollado por "personas ajenas a la institución". La docente manifestó estar muy angustiada: "Me duele más la situación que vivimos en el aula que los golpes que me dieron", lamentó.
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