El río sigue creciendo y suman 42 familias afectadas

Martes, 8 de marzo de 2016

Los últimos informes hidrológicos trajeron algo de alivio. Reflejan una moderación en el crecimiento del Paraná. En un día se sumaron más de 10 grupos familiares damnificados, pero estiman que no hará falta la apertura de nuevos centros.

Las consecuencias del fenómeno El Niño continúan provocando el aumento en el caudal del río Paraná lo que genera el continuo desborde de las aguas sobre las zonas costeras, panorama que obliga a que nuevamente se vaya incrementando el número de familias damnificadas. Ayer la Municipalidad contabilizó 42 en total.
Tras el nuevo repunte del río, que en la víspera marcó en el puerto local una altura de 7,25 metros, manteniéndose en el nivel de evacuación, desde la Dirección General de Acciones Directas y Compensatorias, su titular Celeste Lazzarini en comunicación con El Litoral manifestó que “estamos muy contentos porque según el último informe del Instituto Nacional del Agua (INA) se pudo conocer que el pico máximo estaría llegando este miércoles y sería tan sólo de 7,35 metros”.
“El estudio revela que estaríamos muy alejados del pico máximo que tuvimos en estos últimos tiempos y eso es un gran alivio para todas las familias de la ribera que padecen los estragos del agua y que se encuentran en permanente estado de alerta como nosotros”.
“Según los estudios la creciente empezaría a moderarse en los meses de marzo, abril y junio y tendería a desaparecer en julio, por lo tanto no estimamos la posibilidad de abrir nuevos refugios”, aseveró.
Con relación al número de familias que residen en las carpas instaladas por el Municipio señaló que “por el momento los núcleos familiares damnificados llegan a 42. De ellos, los evacuadas en los centros son 12 del barrio Itatí, Sol de Mayo y Quinta Ferré; 8 de La Tosquera y 3 del Caridi. Mientras que el resto se encuentra autoevacuados en la casas de sus familiares”.
En referencia a los operativos de fumigación y de salud, la funcionaria manifestó que “en los próximos días se darán a conocer el cronograma de fechas a fin de asistir a todos los sectores de riesgo”.
Asimismo, también hizo hincapié en la asistencia constante que realizan a través de los módulos de mercaderías y agua mineral a todas las familias de la costa.
Máxima
Hay que recordar que en este último tiempo el pico máximo fue de 7,47 metros el 9 de enero. Al nivel de evacuación, los 7 metros, ahora se superó por cuarta vez manteniéndose esas condiciones. Y el número máximo de familias perjudicadas durante el lapso entre el 22 y 25 de diciembre, se llegó a 72 familias evacuadas en los centros y con los autoevacuados totalizaban casi un centenar.
Otro detalle no menor es el crecimiento abrupto del caudal y que se venía sucediendo en este último periodo en torno a los 20 centímetros, empeorando así la situación.
El registro más bajo fue de 5,71 el 25 de febrero, que generó en consecuencia el retorno de todos los afectados a sus viviendas, situación que no duró mucho ante este último repunte, que promete no llegar a cifras históricas pero que todavía repercute en la calidad de vida de los ribereños.
Al promediar las fluctuaciones del caudal del río y según los estudios hidrológicos, se temió que el mismo llegará a alturas extraordinarias similares a los registros históricos. es decir de los periodos 1982/1983 y 1997/1998, donde el caudal superó los 9 metros y avanzó por sobre la avenida costanera General San Martín. Sin embargo, ahora las condiciones serían mucho más moderadas.