El Municipio denunciará a organizadores de una desbordada fiesta de disfraces en la costa

Lunes, 31 de octubre de 2016

Aseguran que había cerca de 6.000 personas y el local estaba autorizado sólo para unas 2.900. Tumbaron vallas y forzaron aberturas no habilitadas en el ingreso. Además, detectaron venta de bebidas alcohólicas a menores de edad. La Comuna adelantó que hará una presentación ante la Justicia penal en contra de la empresa.

Fueron varias las fiestas de disfraces que se llevaron a cabo en la ciudad durante el fin de semana, en el marco de los festejos por Haloween. El Municipio capitalino realizó inspecciones en los distintos eventos y detectó graves irregularidades en el que se desarrolló en el predio del club Boca Unidos, en costanera Sur.
Allí, los inspectores del área de control advirtieron graves faltas de distinto tipo. En primer lugar, en la fiesta había cerca de 6.000 personas mientras que estaba habilitada para unas 2.929. Por otra parte, en el predio ingresaron menores de edad luego del horario permitido y a quienes se les estaba vendiendo bebidas alcohólicas.
Un total de 15 inspectores del Municipio llegaron al lugar cerca de las 2.30 y constataron unos 300 metros de fila de personas que esperaban para entrar mientras que en el interior ya se había colmado la capacidad total.
Algunas de las personas que acudieron a la fiesta comentaron que realmente la situación se desbordó cuando los jóvenes derribaron las vallas y forzaron aberturas que no estaban destinadas al ingreso.
En contacto con El Litoral, el director General de Control e Inspecciones, Carlos Cánepa comentó que “clausuramos el evento porque incumplía con las normas más básicas de seguridad”. Asombrado por la situación, Cánepa expresó además que “la fiesta era un desastre, en muchos años yo nunca vi algo igual”.

Advertencia
Según comentaron desde el área comunal, los inspectores realizaron una recorrida entre las 22.30 y las 1.30 en tres de los lugares donde se realizaban este tipo de eventos.
En esa oportunidad habían alertado a los organizadores de la fiesta que se realizó en Boca Unidos sobre las irregularidades que comenzaban a hacerse visibles.
Respecto de esta cuestión, Cánepa contó que “estuvimos temprano en el Club Regatas y en (el boliche) Ribera y la situación en ambos lugares estaba bastante tranquila”, y agregó: “En el Boca Unidos advertimos la situación y pedimos que traten de controlar antes de que se desborde”.
El director de Control e Inspecciones admitió que es frecuente la venta de bebidas alcohólicas en locales bailables. La mayor gravedad de este caso según comentan desde la Comuna radica en que el evento estaba dirigido en gran medida a adolescentes menores de edad.

Clausura
Más allá de la medida implementada por la Comuna, la fiesta siguió su curso y no fue desalojada. Al respecto, Cánepa explicó que “nosotros hicimos la clausura administrativa pero no contamos con el acompañamiento del personal policial que también había sido desbordado por la cantidad de gente”. Además, el funcionario opinó que “evacuar una fiesta de manera intempestiva es a veces muy peligroso”.
Con el local ya repleto de personas, se produjeron abalanchas afuera de quienes pretendían ingresar. En este sentido, Cánepa aseguró que “si alguien se caía en ese momento iba a morir aplastado” y sentenció: “Pudo haber sido otro Cromañón”, haciendo referencia a la tragedia ocurrida en Buenos Aires en diciembre de 2004 que dejó casi 200 muertos.
Además, personas que asistieron al evento contaron que una vez que estuvieron cerca de la entrada se dieron cuenta de la situación pero les fue imposible retirarse de la zona por el amontonamiento que había.
Asimismo, la multitud forzó una entrada y accedió al local por lugares no habilitados. Se registraron también algunos altercados entre los asistentes al evento que terminó con algunas roturas en el lugar y personas con varias lesiones leves. “Se puso en riesgo la integridad física de todos los que estaban ahí de una manera muy irresponsable”, afirmó Carlos Cánepa al respecto.
El Municipio realizó el control y labró las actas de infracción correspondientes. Además, anunciaron ayer que denunciarán a la empresa organizadora. “Las multas las dispone la Justicia pero desde nuestra parte vamos a ser inflexibles con este tipo de situaciones”, afirmó Carlos Cánepa al respecto.
El intendente capitalino, Fabián Ríos se expresó a través de su cuenta de twitter. El jefe comunal escribió que “la fiesta que se realizó en Boca Unidos pudo haberse convertido en una tragedia”. Además, el jefe comunal opinó que “los policías e inspectores municipales no podían parar un desenfreno generado con alcohol por los organizadores”.

Sanciones
Luego de los controles realizados en la madrugada del domingo y las expresiones de repudio hacia el accionar de los encargados de la organización del evento, desde el Municipio anunciaron que tomarán medidas por lo ocurrido.
Por un lado, adelantaron que sancionarán a la empresa responsable y además harán presentaciones ante la Justicia penal por las irregularidades. Respecto de esta cuestión, Cánepa expresó además que “el club dueño del predio también tiene cierto grado de responsabilidad y puede ser sancionado por lo que ocurrió allí”.
En cuanto a los controles nocturnos en general que se realizan en locales bailables, desde la Comuna aseguran que continuarán inspeccionando de manera exhaustiva para evitar que se registren irregularidades como las de este fin de semana.
“Extremamos los operativos sobre todo en esta época del año porque ya comienzan a realizarse fiestas masivas entre noviembre y diciembre”, finalizó Cánepa.