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Insólito caso del gato que votó en las elecciones
Jueves, 20 de octubre de 2016
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Una periodista francesa hizo que su felino sufragara en la interna de uno de los partidos políticos para exponer las irregularidades del sistema electoral. La primera característica que debe pregonar en un sistema electoral, cualquiera sea su procedencia, es la seguridad. Cuando un procedimiento no es confiable para sus ciudadanos, afloran las dudas en torno a un posible fraude. Una situación similar se presenta hoy en Francia a partir de que un gato lograra depositar un voto en una urna.
El mandato del presidente francés François Hollande llega a su fin tras 5 años. Las autoridades electorales ya decretaron el 23 de abril del año que viene como la fecha de celebración de los comicios. El partido socialista, actualmente al mando, tiene como sus principales contendientes a los conservadores; facción que cuenta entre sus candidatos al expresidente Nicolas Sarkozy. Además, también aparece como un potencial rival un partido político más pequeño.
El partido Europa Ecología-Los Verdes, fundado en 2010, emerge como una posibilidad a las agrupaciones políticas tradicionales. Aunque su sistema de elecciones primarias, para dilucidar el candidato que competirá en los comicios generales, fue expuesto a un serio cuestionamiento después de que una periodista del diario Le Monde mostrara cómo su gato logró votar en la interna.
Para lograr el cometido de sacar al descubierto una deficiencia del sistema electoral, la periodista Raphaëlle Besse Desmoulières registró a su gato con el nombre ficticio de Gastón Lecat a través del sitio web del partido. Los únicos dos requisitos solicitados fueron la edad -que debía superar los 16 años- y su lugar de residencia, que debía ser en algún punto del territorio francés.
Una vez pasado el registro, sin ningún tipo de verificación de los datos de la identidad del adherente, las boletas llegaron al domicilio de la periodista y su gato para que, de ese modo, pudiera ejercer el voto. La elección se puede realizar a través del correo postal, por lo que nunca fue necesario que presentara una identificación ante una autoridad.
Gaston Lecat terminó votando en blanco en la búsqueda de no incidir en los resultados de la interna del partido ecologista, pero su dueña se preguntó en el artículo: "¿Podrían estos registros ficticios alterar un resultado apretado?". De esa manera, cumplió en forma elocuente su objetivo de evidenciar las fallas en el sistema de seguridad electoral y la consecuente posibilidad de un fraude.
Bruno Bernard, uno de los principales miembros del partido ecologista, respondió al artículo con un tono jocoso en su cuenta de Twitter: "A pesar de que luchamos por los derechos de los animales, el gato no podía votar pese a estar registrado". A su vez, agradeció a la periodista por el aporte económico que realizó al momento de incorporar a su gato a la facción política.
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