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Un intendente irá a juicio acusado de trata de personas
Sábado, 8 de octubre de 2016
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Se trata de Luis Enrique Rogers, titular del jefe municipal de Lonquimay, La Pampa. Para el funcionario, los prostíbulos son “lugares de contención para mucha gente que está sola”
Luis Enrique Rogers, intendente de la localidad pampeana de Lonquimay, está acusado de ser cómplice de una red de trata de personas que explotaba mujeres y por decisión del juez federal de Santa Rosa, Luis Salas, deberá afrontar ahora un juicio oral. El jefe municipal está sospechado de ser cómplice en la explotación de mujeres en el prostíbulo denominado "Good Night", ubicado en esa localidad. Es la primera vez que un intendente deberá afrontar un proceso por trata.
En línea con lo solicitado por la fiscal subrogante Adriana Susana Zapico,la medida alcanza también al ex jefe de la comisaría de esa ciudad, Carlos Adrián Alanis, y otros tres imputados que serían el dueño del boliche, su hermano y el encargado.
De acuerdo con la investigación, todo habría ocurrido entre febrero de 2008 y septiembre de 2009. Se presume que la organización participó en el recibimiento y traslado de al menos seis mujeres en situación de vulnerabilidad para explotarlas sexualmente en el local, propiedad de uno de ellos y con la complicidad del comisario y de Rogers.
Según el sitio Fiscales.gob.ar, la funcionaria del Ministerio Público Fiscal cree que tanto Rogers como Alanis "no cumplieron con sus deberes de funcionarios públicos", al tener conocimiento de lo que sucedía en "Good Night" y "omitir voluntariamente realizar la denuncia correspondiente".
Zapico detalló que su complicidad se vio reflejada "en su carácter de intendente de la localidad de Lonquimay mediante el mantenimiento de la licencia comercial extendida por el Municipio pese a que firmó las libretas sanitarias de las mujeres que trabajaban en el lugar –para lo cual es requisito la presentación de exámenes médicos ginecológicos y análisis referidos a enfermedades de transmisión sexual, lo que es indicativo del ejercicio de la prostitución por parte de las víctimas".
Las increíbles declaraciones del intendente
Asimismo, la fiscal se basó en los insólitos dichos de Rogers para justificar la actividad del prostíbulo y en las que advirtió que vetaría cualquier ordenanza en contra del local nocturno. Según dijo, "es un lugar de esparcimiento y contención espiritual para jóvenes y camioneros que pasan por la zona".
Al respecto Rogers agregó: "Me asesoré con varios policías y me advirtieron que el cierre podría causar prostitución callejera, descontento social y hasta una epidemia infecciosa. Bajo mi óptica, funciona bien y es todo legal. Las inspecciones se hacen y las chicas tienen la libreta sanitaria al día".
Para la funcionara judicial, Rogers "conocía que las mujeres que trabajaban en el local 'Good Night' ejercían la prostitución, por lo que en realidad encubría una casa de tolerancia prohibida por la ley, pese a lo cual en su condición de funcionario público competente no arbitró los medios a su alcance para clausurarlo y denunciar la situación a las autoridades judiciales competentes".
Además, se suman la presunta relación cercana que tenían el intendente, el policía y el propietario del cabaret, reflejada en los dichos de las testigos y en las comunicaciones telefónicas acreditadas en el expediente.
En octubre de 2013, luego de varios pedidos realizados por la fiscalía, la Justicia federal de Santa Rosa finalmente ordenó el llamado a indagatoria de Rogers y del uniformado.
En mayo de 2014, los imputados fueron procesados, aunque el 14 de noviembre, la Cámara Federal de Apelaciones hizo lugar al pedido por la defensa y revocaron la decisión.
En diciembre de 2015, la Sala IV de la Cámara de Casación Penal hizo lugar a un recurso presentado por los fiscales y revocó los sobreseimientos de los funcionarios públicos.
En La Pampa, por el momento ya hay cuatro intendentes que son investigados por presuntas complicidades con las redes de trata de personas con fines de explotación sexual.
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