Cuatro ocupantes de un auto transportaban 128 kilos de marihuana

Martes, 15 de agosto de 2017

Efectivos del Escuadrón 57 interceptaron el paso de un vehículo en la ruta nacional Nº 14 en Santo Tomé y constataron que había droga.

Cuatro ocupantes de un automóvil quedaron presos cuando, en un control en la ruta, los gendarmes constataron que transportaban una carga de droga. Se decomisaron 128 kilos de marihuana. El procedimiento se realizó el domingo, en la ruta nacional Nº 14, a la altura del paraje Cuay Grande, en jurisdicción de la localidad de Santo Tomé, dijeron fuentes de la fuerza. Los efectivos, que realizaban un control de documentación de vehículos y de personas indicaron al conductor que se detuviera. Mientras se verificaba la documentación se inspeccionó el coche y se descubrió que había droga. Los gendarmes le pidieron que salgan del vehículo y se inició la requisa.
La marihuana se hallaba en distintos compartimientos. Se contabilizaron 356 ladrillos de cannabis, que pesaron 128,265 kilos.
Se dio intervención al Juzgado Federal de Paso de los Libres.

Ramada Paso

El comandante Claudio González, del Escuadrón 48 “Corrientes”, brindó algunos detalles del procedimiento realizado la semana pasada en la zona de San Cosme, en el que se secuestraron 529 kilos de marihuana. La droga era transportada en un Chevrolet Meriva, que fue abandonado por dos ocupantes que huyeron a los tiros.
González sostuvo que se hallaban desplegados en la ruta nacional Nº 12 porque tenían información sobre el movimiento de una carga de marihuana que había ingresado al territorio correntino desde Paraguay.
Unos gendarmes realizaron señas al conductor de un automóvil para que se detenga, pero desobedeció y se alejó a toda velocidad por lo que se inició la persecución. Asediado por los efectivos, los dos ocupantes del coche bajaron y comenzaron a correr hacia el monte mientras efectuaban disparos con armas de fuego, que fue repelido por personal de la fuerza. Uno de los narcos cruzó por una cancha situada en la zona urbana de San Cosme, donde unos 30 chicos de entre 8 y 12 años practicaban fútbol con un entrenador. Se tiraron cuerpo a tierra y luego abandonaron el campo de juego buscando un lugar seguro. Los narcos huyeron.